Asakusa, el barrio más tradicional y con más historia de toda la ciudad de Tokio. El ambiente en Asakusa cambia radicalmente con respecto al ritmo trepidante de la metrópolis, y el Templo Sensoji es el epicentro de todo ese ambiente. En muchas zonas parece como si el periodo Edo, con su tradición y sabor añejo, no se hubiera acabado. Es habitual que mucha gente siga utilizando el kimono o el yukata en el caso de los hombres, y muchos adolescentes los alquilan también cuando visitan el Templo Sensoji. Y es que esta zona de Tokio que se extiende al este de Ueno hasta la rivera del río Sumida, los carteles luminosos, los grandes edificios de hormigón y las tribus urbanas dejan paso a la tradición, a la espiritualidad y al sosiego, siempre y cuando las hordas de turistas y la gran afluencia de gente lo permitan.