Nuestro "road trip" por las carreteras polacas continuó hasta una de las ciudades más grandes de Polonia. Poznan es reconocida como la cuna de la nación polaca y la capital de la región de Gran Polonia. Una vez que dejamos el coche en el aparcamiento y nuestro equipaje en el hotel nos lanzamos a explorar esta sorprendente ciudad, de larga y convulsa historia, y que aglutina una gran variedad de estilos arquitectónicos en sus calles y sus barrios. Una gran ciudad polaca, a poco que se precie, debe poseer una pintoresca Plaza del Mercado. Y Poznan no iba a ser menos que ninguna otra. Pero antes de nada, nuestro recorrido a pie desde el hotel hasta el centro histórico de la ciudad nos llevó a una amplia plaza, la plaza Wolnosci, con una señorial colección de edificios y la fuente Wolnosci presidiéndola. Más adelante, ya entre callejuelas, una de ellas nos llevó hasta el Castillo Real, en lo alto de una pequeña colina.