Kristiansand, debido a su emplazamiento en la zona más meridional de Noruega, se ha convertido en la ciudad preferida por los noruegos para pasar sus vacaciones de verano. Su situación ofrece los atractivos de los fiordos cercanos, islas e islotes donde disfrutar de una relajante navegación y de una jornada de pesca, o por qué no, de un refrescante baño en una de sus playas. Nosotros llegamos de rebote a esta pequeña ciudad, ya que poco antes de iniciar nuestro viaje nos llegó un correo electrónico de la naviera Cunard comunicándonos que suspendían la escala en Aarhus (Dinamarca) y la sustituían por Kristiansand. Claramente salimos perdiendo con el cambio, pero como no estaba en nuestras manos...