Cobh fue nuestra puerta de entrada a Irlanda. El "Caribbean Princess" atracó en el muelle de la pequeña población ribereña a primera hora de la mañana en un día que se presentaba gris y plomizo en primera instancia, aunque más tarde conseguimos ver abundantes claros. Clima cambiante como corresponde a las Islas Británicas. Decidimos ir primero a la ciudad de Cork -lee aquí la entrada de Cork- para seguir con nuestra máxima cuando vamos de crucero, que no es otra que desplazarnos primero al punto más lejano para dejar lo más cercano al barco para el final. La historia reciente de Cobh quedó ligada al destino del Titanic. Cobh fue el último puerto de escala en el que recaló el desafortunado transatlántico de camino a Norteamérica, ya que esta pequeña localidad fue uno de los puntos más importantes por el que la emigración abandonaba Irlanda. Fue la última imagen de su tierra que vieron millones de irlandeses antes de partir hacia nuevos mundos en busca de oportunidades.